ESCUDO DE ZAFRA

jueves, 2 de octubre de 2008

SEGEDA

SEGEDA

Diferentes consideraciones hay que tener en cuenta con arreglo a las noticias que nos trasmitió Plinio, en su obra Naturalis Historia, escrita a mediados del siglo I d. C. Y en buena medida contemporáneo a otros autores anteriores.
La obra de Plinio se considera la más precisa y completa para el conocimiento del mundo prerromano del Suroeste Peninsular. A esto se puede citar dos fuentes a dichas observaciones en su magistratura en la Hispania Citerior le proporcionase, Terencio Varrón para sus descripciones geográficas y Marco Vipsanio Agripa también en sus relatos de los pueblos y localidades.
A todo esto cabe citar, que Plinio en el uso de las fuentes usadas para escribir su obra, las hay con graves errores, herencia de descripciones mucho más antiguas, como ejemplo de narración de las costas atlánticas el cual Plinio “El Viejo” corrigió y comprobó “in situ” durante su estancia en la Hispania, se puede observar en un conocido y rico párrafo los oppida, pueblos, creencias y costumbres de la Beturia:
<Los Célticos oriundos de los Celtíberos, son venidos de la Lusitania y ello se manifiesta en los cultos, lengua y los nombres de las oppida, por cuyos cognomina se distinguen en la Bética: Seria, llamada Fama Ilulia, Nertóbriga, Concordia Ilulia, Segida, Restituta Ilulia, Contributa Ilulia Ugultunia, ahora también Cúriga. Lacimurga, Constatia Ilulia, a los Zairenses Fortunales y a los Callenses Eneanicos. Más allá de éstas, en la Bética se hallan, Acinippo, Arunda, Aruci, Turóbriga, Lastigi, Salpesa, Saepone, Serippo.
Étnicamente está habitada por dos pueblos de diferente origen o contexto cultural: célticos y túrdulos.
Los célticos ocupan el sector occidental de la Beturia hispalense o cordubensis, aunque por razones políticas estén adscritas a ellas. Por tanto la Beturia se describe a continuación y no dentro del convento hispalense. Los célticos han llegado de Lusitania y tienen creencias, lengua y toponímia idéntica a los de los Célticos, por lo que se le supone este origen:
Los oppida, de la Beturia Céltica son “Seria, Fama Julia””Nertóbriga, Concordia Julia” y “Contributa Julia Ugultunia, ¿Medina de las Torres? Estos poblados se diferencian de los restantes de la Bética por su cognomina “Ilulia” ya que debieron ser definitivamente integrados por Cesar en el sistema jurídico romano y por sus nombres de clara ascendencia celta.
La identificación de las citadas localidades en ciertos casos no están exentas de alguna dificultad por la falta, escasez y aportes epigráficos de precisión; una de estas localidades es SEGIDAE Restituta IULIA: Esta localidad es una con más incógnitas a la hora de su localización.
Por tradición, y como ya se ha expuesto desde (Rodrigo Caro) se ha admitido la ciudad de Zafra, como la citada “SEGEDA” en la misma comarca del río Ardila y que cumple con perfección los requisitos en la ubicación de esta Beturia de los Célticos. Otras localidades con incógnitas son: Seria, Fama Iulia: García Iglesias, Albertini y García y Bellido la creen en Jerez de los Caballeros No aceptándola Marchetti, que la ubica en Moura (Portugal, 1917, 347). Contributa Iulia Ugultunia: Situada por Albertini en Fuente de Cantos (Badajoz), a raíz del hallazgo de una inscripción que se lee PATRIA CONTRIBUTENSI, término este último que se repite en otro epígrafe encontrado en la vecina Medina de las Torres. (ese caso es similar al epígrafe encontrado en su día en Zafra ).
Una inscripción con el patronímico de Segedensis (ya citada en páginas anteriores) fue la principal prueba, otro epígrafe de similar características fue hallado en la ermita de la Virgen de Cala (Huelva) en el cual el texto muestra con claridad los cognomina latinos aunque no con el nombre indígena que se supone en SE NTIA. Esta ubicación, al sur de la cuenca del Ardila, no alejada de Nertóbriga es bastante congruente , otro lugar propuesto por González y Pliego es el cerro del Castillo, un yacimiento romano al NE, de Gerena (Sevilla). A todo esto cabe citar que estas localizaciones propuestas por estos autores, rompe la armonía geográfica de las ubicaciones de las poblaciones betúricas expuestas por Plinio.
Según lo expuesto es más lógico y razonable poder considerar el emplazamiento de SEGIDA EN ZAFRA, en la cual durante el año 1987 se realizó una campaña de excavación de urgencia al lado de la ermita de Belén, donde se localizó un importante poblado protohistórico, con estratigrafía desde el siglo IV al I a. C.

Sobre el topónimo de SEGIDA, muestra uno de los radicales más frecuente de la onomástica céltica y germánica: SEGHI – “Vencer”, cuya repartición en topónimos es tan abundante como significativa . Existiendo otro topónimo similar en la región de Segovia, en Elvas, donde existe un importante poblado prerromano, otro valioso poblado es el localizado cerca de la población del Poyo de Mara (Zaragoza) según fuentes clásicas consideraban a esta localidad la capital de la tribu celtíbera de los Belos. Esta ciudad acuñaba sus propias monedas y fue uno de los primordiales bastiones en la resistencia hacia los romanos.
Otra etimología del topónimo de Segeda de origen lingüístico céltico y significado, es “poderosa”
Por tanto el nombre de Segeda es la lectura clásica del término celtíbero de SEKEIDA, conservándose en monedas acuñadas.

RESUMEN Y APORTACIONES A SEGEDA

Como se ha explicado con bastante base histórica, y científica, la obra de Plinio “El Viejo” es sin duda el alma de cualquier investigador para adentrarse en los pueblos prerromanos del Suroeste peninsular y en concreto a SEGIDA, sin olvidar también a Ptolomeo que junto a Plinio citan a tres ciudades hispanas; Segida Restituta Julia de los célticos; Segida Augurina de los Turdetanos y Segida de los Túrdulos, relacionándose una cuarta, la bastetana Segisa. Antonio Salazar en su obra (El Castillo del Castellar, año 1955) nos dice acerca de esta población que no es tal, tan solo los escritores del siglo XVII AL XIX en sus falsos cronicones daban vida a esta hipótesis, así como en Zafra no ha aparecido ningún vestigio arqueológico , en pleno siglo XXI hemos de pensar que esos falsos cronicones ya no existen, ahora existe una metodología científica de grandes medios técnicos y otra mentalidad de investigación, por lo tanto a la aparición del libro citado en el año 1955, sería evidente la falta de un interés arqueológico, así como prospecciones en la zona o término zafrense para eludir lo expuesto, que no es lo mismo las diversas apariciones que con toda seguridad surgirían y caerían en el más absoluto silencio.
En la actualidad se conocen paneles de Arte Rupestre Esquemático, de la Edad del Bronce en el Castellar, asentamientos Calcolíticos, infinidad de Villas romanas, excavaciones arqueológicas en la Madre del Agua (Edad del Hierro), excavaciones en la Ermita de Belén (Edad del Hierro), Torre de San Francisco (Edad del Bronce, Romano, etc). A esto cabría decir que estos poblados siempre han estado en nuestro suelo, por lo tanto esos falsos cronicones hemos de pensar a ciencia cierta que todos tenían una base con más o menos rigor.
Actualmente y en base a todos esos hallazgos que de forma casual, y a la mayor sensibilidad de una parte del pueblo, así como la investigación de campo y laboratorio se podría decir que se están sentando cimientos cada vez más evidentes que en Zafra esté ubicada la SEGIDA de Plinio, de la etapa alto imperial, no obstante como se ha ido exponiendo en páginas anteriores cada cronista ha ido exponiendo su propia idea en diferentes localidades, ideas no descabelladas, tan solo sin cierto rigor de campo y a la vez se podría decir con base a los hechos del momento, así como que el topónimo SEGEDA existen varias por el territorio de la Hispania, y es quizás la SEGEDA de Soria la más popular, tan solo que no pertenece a la Beturia sino a la Tarraconense, Plinio nos dejó escrito en su (Nat. Hist. III ) que está antes de Nertóbriga y después de Curiga, no estando lo suficientemente claro su exposición, pero sin duda dentro de la Beturia, y la cuenca del Árdila, de entre las dos localidades citadas existen dos puntos intermedios, Zafra – Burguillos del Cerro, ahora bien como paso directo del río Árdila son otros dos puntos Valencia del Ventoso y Burguillos del Cerro, si contamos la cuenca de dicho río entra Zafra a tomar parte, haciendo un triangulo, a todo esto habría que ver otros factores como la ganadería, minas y vías de comunicación a otras ciudades importantes, en este caso Valencia del Ventoso quedaría descartado al estar más al sur y alejado de la Vía de la Plata y la ruta con Huelva, Burguillos ofrece minería (hierro) Zafra lugar estratégico comunicación, y cerca del río Guadiana, lugar menos agreste, más en línea con ciudades importantes, por tanto la elección de SEGIDA su ubicación nos plantea una incertidumbre paro sin duda de estar SEGEDA con nosotros; los últimos descubrimientos en Zafra en poblados de la Edad del Hierro han avivado todas la teorías incluso desechando a los falsos cronicones en su negativa de la aludida ciudad ubicada en el termino citado. Ahora bien el siguiente problema se plantea en cual de estos dos pueblos está situada ¿ Zafra o Burguillos del Cerro ?. Como hemos visto Zafra reúne unas características más idóneas en deterioro de otras por lo tanto creemos y esto es solo una aportación personal y no científica, eso sí después de años de patear e investigar evidencias palpables que por su peso pueden madurar en un futuro.
Ni Zafra ni Burguillos son SEGEDA, en la terminología citada, ambas son parte de SEGIDA un territorio inmenso; en la actualidad los pueblos se dividen en términos con sus parcelas, hace 20 siglos eran territorios dentro de un todo “La Beturia” por tanto SEGEDA en la actualidad abarcaría los pueblos citados, sin descartar a la localidad de Valencia del Ventoso... y sin olvidar que Zafra por situación estratégica SÍ podría ser el centro neurálgico de SEGIDA.


Schulten. 1959. 138
Berrocal Rangel Luis. Los Pueblos del Suroeste de la Península Ibérica.
Plinio Secundo Cayo. “El Viejo” Historia Natural, III.
Untermann, 1961, 18
Iglesias García. 1971, 90,91
Iglesias García. 1971, 89,90
Salazar Fernández Antonio. El Castillo del Castellar. Año 1955
Luzón. 1978, 290 y 307
Rodríguez Día Alfonso. La Ermita de Belén. Zafra.
Untermann. 1961, 18-19 y 34-35, K: 19; Albertos, 1966,201
Gamito. 1988
Poblado, en el cual desde el año 1998 el profesor Francisco Murillo Mozota de la
facultad de humanidades de Teruel, realiza excavaciones en esta Segeda.
Teoría del Investigador José Ant. Amador Redondo

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